2 de Febrero de 2011.
Cu'anto tiempo tiene que pasar la capacidad instalada que tiene Canal 42 en la comunidad Nino Dios de Malloco en reposo, o sea, en forma pasiva? Esta es la inquietud que estoy planteando a la comisi'on parroquial de dicho canal; porque me parece que dicha materia prima -tan importante como es la comunicaci'on- debe estar en actividad, en movimiento; acompanando y/o motivando la creatividad, la organizaci'on en torno a las expresiones culturales y art'isticas de miembros de la comunidad local. Y me parece que no hay que esperar a que las leyes se dignen a dar "luz verde" para empezar a actuar.
No s'e todav'ia que respuesta y qu'e procesos se pueden generar con esta inquietud.
miércoles, 2 de febrero de 2011
sábado, 29 de mayo de 2010
nuevo emprendimiento
Sábado 29 de Mayo de 2010.- Al término del Otoño, también se conoce el término de la experiencia de tv comunitaria... sueño al que dediqué muchas ganas, esfuerzos y creatividad. Una obra que queda a la vera del camino; pero que me da pie para emprender otras, que tengan que ver siempre con la comunicación: más humana, social y solidaria.
sábado, 15 de agosto de 2009
"LA MIRADA DE MARÍA... en busca de un punto de inicio"
"LA MIRADA DE MARÍA… EN BUSCA DE UN PUNTO DE INICIO"
Por: José Leandro Flores
Chile, 12/06/2009 9:08:12
I
Muchos días son noches para mí, y camino en medio de ellos como una especie de robot. Miro pero no veo. Estoy en la sala de clase, pero no estoy. Oigo pero no escucho… A veces pienso que todos son como yo, pero que desimulan. Tengo la impresión que nadie cree en lo que dice. Que todos llevan dobles vidas… y por eso, yo prefiero ser de una pieza.
Por supuesto, esto no lo converso con nadie. Con mis amistades nada más somos como somos, y no nos cuestionamos de cómo somos. Es más, la verdad es que no nos interesa ser como los demás. Nos caen mal. Creemos que están equivocados, y que han hecho mal todo; incluso con nosotras han sido torpes.
En realidad, nosotras no somos como somos porque querramos, sino porque somos el producto de las circunstancias que han creado a nuestro alrededor los adultos. Ellos han tenido el primer turno de ser los protagonistas, y nosotros somos en gran parte su producto. Somos su resultado. Por eso nos molesta mucho que se quejen, que nos reclamen, y que nos acusen, como si nosotras fuéramos las tontas, las flojas (perezosas), las descarriadas.
De verdad, nos reímos de todo esto, porque sinceramente pensamos que todos esos epítetos en primer lugar se los merecen ellos mismos. Aunque no se den cuenta o no quieran reconocerlo.
Y por eso, me he decidido a escribir este relato, para dar cuenta de lo que he vivido y he visto que a otras les ha tocado vivir; que no son cualquiera, sino que son mis amigas y amigos, conocidos y vecinos. No me anima el resentimiento ni sentimientos de venganza; al contario, soy consciente que necesito de todos Uds. Para poder vivir y desarrollarme. Pero esto solamente va a ser posible cuando "nos entandamos".
Bien sabemos que lo que hoy reina entre nosotras, es la descalificación. Y esto está generando una fuerza que nos impulsa a actuar a nosotras de manera incontrolada y de forma reaccionaria. Uds. Tienen que saber que nosotras somos las primeras es darnos cuenta, porque lo vivimos así, que estamos siendo víctimas de un síndrome perverso de incomunicación.
Este fin de semana para mí ha sido un desastre. He consumido, me he dejado llevar por la vorágine del descontrol personal, envuelta en el remolino de la irresponsabilidad conmigo misma, con mi salud, con mi dignidad… Y ante esto, yo casi los puedo comprender a Uds. Que me juzguen y condenen como una cualquiera, sin valores ni principios… Pero quisiera que se dieran cuenta que todo esto es una "reacción".
EL SÍNDROME DE LA REACCIÓN
Creo que este puede ser un buen concepto para tratar de explicar el abismo en que estamos, donde no nos conocemos, ni nos valoramos, ni nos amamos… aunque vivamos bajo un mismo techo y usemos la misma mesa para comer. Es allí donde nos ignoramos, nos juzgamos y despreciamos.
Yo siento vuestro desprecio; y con seguridad, Uds. Sentirán mi desprecio, porque los desprecio por ser como son. Si Uds. Piesan que yo soy víctima; yo también pienso igual que ustedes son víctimas de las circunstancias, de los tiempos, del sistema. Que ustedes no son libres. Tampoco responsables, ni éticos, ni religiosos, ni sinceros. Más bien entre ustedes son cínicos, falsos, de doble estadar, explotadores, individualistas, violentos y excluyentes.
¿Cómo pueden pretender, entonces, ustedes que yo y mi generación se alínee a vuestra farsa? No creen que es demasiado pedir; y que es una petición absurda. Creo que solamente los estúpidos podrían acatar tan temeraria solicitud. ¿Acaso no se dan cuenta que Uds., los adultos, han creado una senda de muerte, individualista; que rehuye de la verdad y de los desafíos. Sí, lo que reina entre Uds. Es la cobardía, es la esclavitud, y la fantasía.
Y, de verdad, no crean que esto es "odio". Porque no lo es. Es el síndrome de la reacción. Es decir, la consecuncia de que no nos entendemos, que no nos amamos; que no solidarizamos. Uds. No quieren conocernos porque no quieren aceptarnos; y a nosotras nos pasa igual. Por eso no crecemos. Por eso caminamos hacia un distanciamiento cada vez mayor en el que nos encuentra la muerte como fin de esta larga incomprensión.
YO NO SOY QUIEN
Yo no soy quien para construir puentes sola. Y de nada serviría si acaso fuera capaz de construirlos, porque Uds. No los cruzarían, porque no son de Uds. El egoísmo, por lo general, nos induce a desacreditar lo que hacen los otros, por el hecho de ser hecho por los otros, y no por ti. Pero en este caso, estos puentes para el encuentro solamente puede ser creados con la participación de todas y todos. Aunque es cierto, que por hoy no estamos haciendo nada, porque nos ignoramos y hasta despreciamos sin culpa.
No te he revelado mi edad; ni lo voy a hacer. Pero ya puedes suponer que no tengo muchos años, porque cometo muchos errores. Todavía no tengo la virtud de la prudencia. Es cierto. Pero tengo la virtud de la sensibilidad; poseo sentimientos y emociones que me indican por donde no está la verdad ni la justica. Por eso rehuyo someterme a Uds. Y a su propuesta de vida; porque no es vida, sino servidumbre.
Y es por eso, que mi mayor compañia es la soledad. Yo me siento y camino sola. No reconzco amigos ni maestros. En esta noche oscura suenan con fuerza los gritos de la desesperanza, la desilución y la amargura. Es cierto, te confieso que no soy feliz; que no conozco la paz, ni el amor. Por eso me envuelvo en las burbujas del placer y de las sendas ahumadas para salir de este mundo chato. Sé que estoy en un camino equivocado en medio de otras sendas también equivocadas que son las de mis congéneres adultos. ¿Por qué no reconocemos que ambos estamos equivocados? ¿Que ni unos ni otros poseemos la verdad? ¿Cuándo podríamos ponernos de acuerdo en esto?
Entonces, sí, estaríamos iniciando un camino, el verdadero camino hacia nosotros mismos y hacia la esencia de nuestro mundo; y nos estaríamos apartándonos todos –nosotros y Uds.- del universo de la falsedad.
Sí, tenemos que educarnos todos. Y dejemos ya esa pretención de que Uds. Nos van a educar a nosotras, porque ante todo Uds. No son educados. Una persona educada no miente, no explota, no se apropia de lo ajeno, no acumula, no roba, no incumple las leyes, no finge ser religioso.
Quizá desde nuestra irreligiosidad y desde vuestra religiosidad podamos salir y encontrarnos como lo que somos, para reinventarnos y reconstruirnos y así comenzar a vivir.
II
EL COMIENZO DEL FIN
Así es como yo me imagino que puede ser el principio de nuestro encuentro. Dándonos cuenta que unos y otros estamos extraviados. Perdimos el rubo –Uds. Antes que nosotras-Pero lo que importa ahora es que comencemos a mirarnos a los ojos, y ver que realmente somos seres que tenemos que hacernos de nuevo, y así renovar todo lo que nos rodea como ideas y como realidad.
No hay tiempo que perder. En esto concordamos: en que Uds. Y nosotras ya hemos tocado fondo. Estamos hecho trizas. Todo lo contaminamos, todo lo destruimos; hemos llegado a ser expertos en maltratar a los otros y a lo otro. Nada nos detiene, ni el descalabro ecológico que ya nos envuelve cual siniestro visitante que se acerca a sus autores. Autores que están sordos, ciegos y encarcelados en sus miserables ambiciones de poder.
Estas son las cenizas en las que podemos encontrarnos, cuando reconozcamos lo que somos, y nos despojemos del afán de "fomar", "educar" y domesticar a los otros.
El tiempo no puede ser más propicio; no porque nosotros seamos excepcionalmente inteligentes ni buenos, sino porque la naturaleza, nuestra madre tierra, nos apremia con amor y con urgencia para que despertemos del sueño y salgamos de la droga en que los grandes intereses económicos e ideológicos nos han encarcelado.
Yo no creo que este comienzo del fin sea imposible. ¡Por favor!, concordemos que es necesario y oportuno que comencemos ahora. Uds. Están cansados, desorientados, y sobre todo estancados. Han caído en un hoyo tan profundo, que no tiene irreversabilidad. Y esto los tiene desesperados, nerviosos, ahogándose en la vorágine de un consumismo irracional, como para no ver, ni escuchar, ni sentir. O sea, una especie de estar muertos en vida.
Y yo creo que este es el problema principal; y no nosotras ni nosotros, las nuevas generaciones. Aunque con frecuencia estamos siendo estigmatizadas de ser las causantes del desajuste que hoy vivimos. Lo que sucede es que nosotras consciente o semi-inconscientemente estamos negándonos a recibirles la antorcha apagada que uds. Quieren pasarnos. Sepan que nosotras nos resistiremos sin límites, porque sentimos que estamos en la razon. Si Uds. Han destruído el habitat, a nosotros nos toca no sólo recibir esa herencia sino también transformarla. Tarea que sólo podremos emprender si nos desprendemos de vuestro paradigma.
DONDE YO APRENDO
En las aulas no aprendo. Me siento forzada a estar ahí. Siento que es una educación que no me servirá para cambiar el mundo, porque son enfoques más bien para dejarlo como está y seguir maltratando nuestro mundo con un sistema a-ecológico.
Sí rescato que hay profesores que privilegian escucharnos y parten aceptándonos como somos, con nuestros coleres y peinados, con nuestros temas y lenguajes. A los cuales les pedimos no que nos dejen como estamos, sino que juntos podamos salir ellos y nosotros desde donde estamos.
En este sentido, yo no me siento totalmente reaccionaria, sino más bien, "accionaria". Y esto molesta a muchos, a los que siguen con una actitud autoritaria y dogmática. De verdad, el aula de clase se me vuelve algo así como una prisión. Algo pasa que no me gusta. No sé si es algo externo o interno a mí. Pero me fastidio.
A veces tengo unos momentos distintos, y es cuendo algún profesor tiene tiempo para "escucharme". Por lo general, así puedo expresar mis búsquedas, mis equivocaciones y mis temores. Y me agada sobremanera que me acepten como soy; que no me juzguen ni me condenen. En realidad, yo soy la primera que estoy consciente que no estoy totalmente en el camino de la verdad, sino en gan medida, en el de el de la rebeldía, la curiosidad y la búsqueda.
Aprender me va constando sangre, sudor y lágrimas. A veces, siento que es una tarea que me supera. Otras veces, que no vale la pena aprender para permancer siendo una excluida, un ser al margen de la vida y la abundancia. Y otras veces, también me doy cunta que es la mejor vía para ser alguien, para ser una persona realizada.
Hay muchísimas cosas que necesito aprender..., pero no sé como. Sobre todo no cuento con los espacios propicios para esta actividad. Hay demasiado ruido a mi alrededor.
Sin embargo, tengo intuiciones y certezas de aspectos esenciales que tengo que aprender, como es mi sentido de pertenencia. Responderme esta pregunta: ¿a dónde pertenezco? La claridad que alcence en esto, me ayudará también saber hacia donde me dirijo o debo dirigirme. Mientras no solucione esto, me encuentro en todas partes fuera de lugar. Y este desencuentro de contexto, refleja también mi desencuentro interior: ¿Quién soy?
Desgraciadamente casi no tengo maestros entre mis profesores que me ayuden en esta búsqueda. Por lo general ellos o ellas se centran en sus materias de clase. Es la educación bancaria y libresca. A mí me parece que ellos mismos, en muchos casos, no han resueltos estos temas en sus vidas. De modo que mi aprendizaje, en grado mínimo, es en las aulas. Y lo mismo puedo constatar que es en mi llamado "hogar" o "familia". Y me enfrento a un vacío: ¿quién enseña? y ¿quién aprende?
NO QUIERO CAMINAR SOLA...
Están equivocados quienes creen que quiero caminar sola. Todo lo contrario, me da pánico la soledad. Por eso siempre me verán escuchando música, como una forma de sentirme en comunicación con otros y otras. Sí, es cierto, que tiendo a aislarme y distanciarme de los adultos; y con ello les quiero decir: que no me gusta que me tomen como "menor", como alguien a quien sólo hay que enseñar. Lo que necesito es que me den espacio, me escuchen y que me hagan sentir que soy "alguien", que soy una persona que piensa y que siente.
No crean que disfruto mi ignorancia, mi falta de palabras y de razonamiento... Ellas sonlas carencias más profundas que siento. Es una oscuridad que amenaza con cubrirme como diciéndome que no tengo nada importante que decir y que hacer.
Por eso, mi verdadera búsqueda es la de la amistad. Voy buscando el encuentro con el otro. Y así camino de un lado para otro, recorro kilómetros de lugar en lugar. Uds. me verán muchas veces así, caminando junto con otros de mi edad. Somos buscadores de sentido, de horizontes, de algo y de alguien. Quisiera que mi silencio lo escucharan como "gritos", como llamadas a nuevos encuentros, también con Uds.
Lo que siento es que parecemos rieles que vamos paralelos, pero no nos encontramos. Sin embargo, el horizonte infinito no lo conocemos, y lo soñamos con esperanza. Me pregunto dónde buscar a Dios; dónde encontrarlo..., y finalmente me respondo que no dentro de los templos ni a través de los predicadores; sino en el amor, en el servicio, en la solidaridad, en el ejercicio profético. Y en esto, sieto que camino sola.
Por eso no me gusta y no acepto que me digan "lo que tengo que hacer" personas o funcionarios en los que no creo; y no por capricho, sino por sus acciones. Y ellos tienen que darse cuenta que no son creíbles. Por eso yo no me siento motivada a ir a los templos, lo mismo que inscribirme en los partidos políticos, o creer en los políticos.
Y no estoy de acuerdo con quienes piensan que estas acciones signifiquen un caos o fragmentación del sistema social o religioso. Todo lo contrario, estas son las actitudes necesarias para cambiar un paradigma que está hecho trizas. Por favor, no me inviten a subir a un barco que va rumbo a la muerte, y que va creando muerte a su paso.
¿PESIMISTA?
Es lo más problable que me juzguen así. Pero creánme que no me siento causa, sino víctima. Receptara de la desesperanza de muchos de Uds.; heredera del fracaso existencial y social de una generación que edificó sobre un sistema económico también fracasado. Por lo tanto, mi generación no está recibiendo un mundo como Uds. lo recibieron. Estamos heredando cenizas.
Pese a todo, es una hora para comenzar, edificar; comenzando por poner los cimientos. Y nos gustaría que Uds. lo comprendieran así e incluso nos acompañaran en este gran empresa. Para ello sí queremos prepararnos, y lo estamos haciendo más que todo a través de la biblioteca digital de la red mundial. Allí no encontramos dogmas, sino el universo de la diversidad, sobre la cual tenemos la responsabilidad de elegir lo mejor en todos los campos que constituyen el ser humano. Y claramente allí está el piso a partir del cual vamos a constuir nuestra imago-mundo, nuestro nuevo paradigma; el cual necesariamente va a ser distinto del actual. Esto es motivo de gran alegría porque el continuismo carece de sentido para todos los seres vivos que poblamos la tierra, y a la tierra misma.
Entonces, uds. pueden tratar de entenderme y comprender que mi "pesimismo" más bien es rechazao a la oferta que existe. Una oferta que no proviene de vuestras manos vacías; y son Uds. más bien que estáis ahogados por una desesperanza que os mata. Basta ver como están de caóticas las relaciones intrafamliares, lugares donde habitamos que han dejado de ser "hogares", y donde ha desaparecido la comunicación. Acaso ¿puede existir un ser humano sin comunicación?. De cierto, que no. Es esa la fuente verdadera del "inhumanismo" que uds. resiente, y que todos resentimos.
Sin embargo, yo me siento como "un árbol verde", ya sea en medio del bosque como en medio de los desiertos. Y esta vida no me la dejaré arrebatar por nadie; ni depender de ellos. Es una esencia personal; de la cual dispongo para compartirla.
"LA MIRADA DE MARÍA… EN BUSCA DE UN PUNTO DE INICIO"
I
EL SÍNDROME DE LA REACCIÓN
YO NO SOY QUIEN
II
EL COMIENZO DEL FIN
DONDE YO APRENDO
NO QUIERO CAMINAR SOLA...
¿PESIMISTA?
¿QUÉ HAY DE MI REBELDÍA?
¿QUÉ HAY DE MI REBELDÍA?
Mi rebeldía es lo que más manifiesto, porque la expreso en todo tiempo. Generalmente es contra los adultos, y sus propuestas. Mostrándoles que no me interesan. Que no las necesito. O sea, no caben en mi cabeza que está llena de rechazo por todo. Yo sé que esto no está bien, pero lo hago por un tiempo, porque me interesa hacerlo saber.
Lógicamente yo sé que esto puede desarrollar procesos de búsqueda, preguntas, y no sólo inquietudes, entre Uds. los adultos. Y eso es lo importante. Así, de seguro, que nos vamos a encontrar en un punto del camino, donde se de la encrucijada, el cruce de caminos, y juntos o no, cada uno reciba el aporte que puede hacer el otro desde su experiencia.
Y, creo, que nadie puede ignorar que hay muchas razones para ser rebelde. Es decir, para no estar de acuerdo con todo esto, para no ser pasivos y solamente agachar la cabeza a todo lo que representa el autoritarismo imperante, que domestica y esclaviza a los seres humanos que lo toleran. Por lo tanto, en la medida que se vaya construyendo un nuevo estilo o forma de ser (paradigma), lógicamente se deberán ir desvaneciendo los niveles de rebeldía.
Me parece, también, que todavía no hemos llegado al "pic" del auge de la rebeldía; y que todavía faltan hitos importantes de la que seremos o serán protagonistas los jóvenes. Sabemos que no somos los más fuertes, sino los más débiles, los más carentes..., pero también los portadores de mayores sueños.
¿A qué se debe mis debiilidades? Lógicamente a una situación integral: poco tiempo vivido, pocas experiencias, poca cultura; pero a mi alrededor, entre ustedes, tampoco veo muchas fortalezas, sino más bien, frutaciones, violencia, incomunicación.
Pero el camino no es por la vía de la comparación ni de la rivalidad..., sino claramente por la complementariedad y comunión. Es decir, darnos cuenta que somos seres en construcción, en definición; realizándonos a cada instante. Entonces, necesitamos unos de otros por igual. Nadie es completa ni está hecho o determinado.
Con este enfoque estamos ante un horizonte más dinámico y abiertos a los cambios. Nos alejamos del determinismo y del estatus quo. Nuestra naturaleza es el cambio.
DIÁLOGO CON UN PROFESOR
- Ud., por ejemplo, es uno de mis profesores. ¿Se cuenta cómo lo tratamos? Como si fuera nuestro principal adversario. Practicamente no lo queremos ver; y por eso nos vamos a conversar al fondo de la sala. Otros juegan y saltan y dan gritos... Y a Ud. se le ve sereno; pero también confundido, a veces preocupado.
- Es cierto. Me muestro sereno, pero dentro de mi hay muchas dudas, interrogantes, búsquedas... Y Uds. representen para mí un verdadero desafío. Lo único que se me ocurre es tener paciencia; esperarlos, con la esperanza que Uds. cambiarán. Reflexionarán.
- No creo que eso ocurra, porque tendrían que cambiar muchas cosas antes o simultáneamente. Se tiene que comprender que nuestra forma de ser tan caótica es consecuencia de muchas causas, entre las que hay familiares, social, económicas, psicológicas, emocionales, afectivas...
- Yo concuerdo en ver así el problema. Y por eso los respecto y considero. Uds. no son victimarios, sino víctimas, queridos jóvenes. Por eso les he dicho que voy a permanecer en medio de Uds. pase lo que pase en cuanto a faltas de respeto de vuestra parte. Alguien tiene que acompañarlos. Y yo me considero capacitado para servirles en ofrecerles algún aporte significativo.
- Está bien. Sólo que esa actitud de su parte, solamente la van a entender, comprender y responder unos pocos de mis compañeros y compañeras de curso.
Incluso, tal vez yo.
- Y de qué depende...
- Creo que es una cuestión emocional, más que todo. Algún detalle, como puede ser su saludo afable, su mirada amable y respetuosa. Creo que es cuestión de que se genere confianza y respecto entre Ud. y nosotros los estudiantes... Igual, me parece, que algunos de mis compañeras y cmpañeros, nunca se acercarán porque son muy profundas sus heridas y sus resentimientos con todo esto que se denomina sociedad. No quieren saber nada de ella. Ellos sienten que dicha sociedad les ha hecho mucho daño a sus padres y a ellos mismos: pasando hambre, pagando usureros intereses, comprando carísimo y enriqueciendo a unos pocos monopolios de supermercados, farmacias, medios de transporte, etc.
- Siempre he dicho que frente a tales planteamientos me quedo sin palabras. Recuerdo cuando un alumno de una cárcel, me espetó: "Profesor, si todos roban, los políticos, las autoridades... yo mismo, siempre he pagado altas cantidades de dinero y así he salido o ni siquiera he entrado a la cárcel; entonces, ¿por qué no voy a robar yo?
- Bueno, ¡yo también me quedo estupefacta!, querido profesor.
APELANDO A LA RESILIENCIA
- Estamos buscando un "punto de encuentro" que sea el principio de un largo camino de encuentro y realizaciones, ¿no es cierto? Y me despierta bastante interés el tema que hace poco nos ha planteado, cuando nos dice: "Si Uds. no se acercan a mí, yo debo de acercarme a Uds". Porque, dice, que lo alienta la esperanza que en nosotras y nosotros hay una fuerza, una energía, una capacidad que nos levanta y saca del hoyo más profundo en que nos podamos encontrar por haber caído en la drogadicción, o en la prostitución, el alcoholismo, la violencia, los robos,... y esto con apenas nuestro promedio de los 16 años de edad. Pero Ud. puede ver nuestros rostros demacrados, pálidos; nuestras mirads perdidas y nuestros cuerpos inquietos por la necesidad de consumir droga. Por escucha nuestros gritos, de vez en cuando en la sala de clase: ¡"Quiero matarme"!
Estos son las expresiones de nuestro drama. Por eso no podemos estudiar, aunque quisiéramos. De verdad, hemos perdido la capacidad de concentración, y el interés por todo. No nos interesa nada, ni siquiera nosotros mismos. Sentimos que no valemos nada. Que hemos nacido para ser nada. Nos sentimos como tendidos, postrados, deshechos... Por eso, Ud. es testigo de nuestras contínuas lágrimas cuando conversamos con Ud. Esos diálogos son muy removevodores para nosotras y nosotros, porque no estamos acostumbrados a que nos escuchen, que nos presten atención, y que a través de su mirada sintamos que quieren creer en nosotros y quieren confiar... Eso es algo maravilloso. Es como empezar a revivir.
- Gracias, María, por expresarte con tanta claridad y acierto. Yo sabía que uds. no son los victimarios, uds. son las víctimas. Es decir, el producto de muchos desaciertos de todos cuantos les hemos antecedido, en todos los campos. Se hizo un giro hacia la letra; y la letra mata. Nos alejamos de la vida, de lo humano, y dejamos de sentir misericordia y compasión. Nos encerramos en nosotros mismos y en nuestras propiedades, olvidándonos de todo compromiso social. Y esto ha sido nuestra ruina. Hemos fracasado.
- Entonces esta es la hora para la resiliencia. Para levantarnos desde las cenizas, todos juntos, ¿no es cierto?, estimado profesor...
Así, María, ¿pero tú no te imaginas cuánto cuesta "ser resiliente"? Cuán difícil es cambiar la mentalidad para dejar de fijarse en los defectos y debilidades de sí mismo y de los demás; y centrarse en sus fortalezas y cualidades. Es un cambio tan gande que modificaría de raíz nuestras relaciones actuales, basadas en la competencia y el desprestigio de los otros. Es una forma de relación muy dañina, que frena todo emprendimiento y menoscaba la confianza. Nuestras relaciones son de desconfianza.
- Efectivamente, de muchas maneras se pretende inculcarnos miedo, como si este no fuera nuestro mundo y nuestro hogar. Nos pretenden hacernos sentir en un lugar extraño y adverso para nosotros.
- Lo que pasa es que quienes están llenos de pánimo, solamente pueden transmitir miedo. La confianza es una de las más grande pérdidas de nuestro tiempo. Se ha convertido en una enfermedad con el nombre genérico de estress.
Por: José Leandro Flores
Chile, 12/06/2009 9:08:12
I
Muchos días son noches para mí, y camino en medio de ellos como una especie de robot. Miro pero no veo. Estoy en la sala de clase, pero no estoy. Oigo pero no escucho… A veces pienso que todos son como yo, pero que desimulan. Tengo la impresión que nadie cree en lo que dice. Que todos llevan dobles vidas… y por eso, yo prefiero ser de una pieza.
Por supuesto, esto no lo converso con nadie. Con mis amistades nada más somos como somos, y no nos cuestionamos de cómo somos. Es más, la verdad es que no nos interesa ser como los demás. Nos caen mal. Creemos que están equivocados, y que han hecho mal todo; incluso con nosotras han sido torpes.
En realidad, nosotras no somos como somos porque querramos, sino porque somos el producto de las circunstancias que han creado a nuestro alrededor los adultos. Ellos han tenido el primer turno de ser los protagonistas, y nosotros somos en gran parte su producto. Somos su resultado. Por eso nos molesta mucho que se quejen, que nos reclamen, y que nos acusen, como si nosotras fuéramos las tontas, las flojas (perezosas), las descarriadas.
De verdad, nos reímos de todo esto, porque sinceramente pensamos que todos esos epítetos en primer lugar se los merecen ellos mismos. Aunque no se den cuenta o no quieran reconocerlo.
Y por eso, me he decidido a escribir este relato, para dar cuenta de lo que he vivido y he visto que a otras les ha tocado vivir; que no son cualquiera, sino que son mis amigas y amigos, conocidos y vecinos. No me anima el resentimiento ni sentimientos de venganza; al contario, soy consciente que necesito de todos Uds. Para poder vivir y desarrollarme. Pero esto solamente va a ser posible cuando "nos entandamos".
Bien sabemos que lo que hoy reina entre nosotras, es la descalificación. Y esto está generando una fuerza que nos impulsa a actuar a nosotras de manera incontrolada y de forma reaccionaria. Uds. Tienen que saber que nosotras somos las primeras es darnos cuenta, porque lo vivimos así, que estamos siendo víctimas de un síndrome perverso de incomunicación.
Este fin de semana para mí ha sido un desastre. He consumido, me he dejado llevar por la vorágine del descontrol personal, envuelta en el remolino de la irresponsabilidad conmigo misma, con mi salud, con mi dignidad… Y ante esto, yo casi los puedo comprender a Uds. Que me juzguen y condenen como una cualquiera, sin valores ni principios… Pero quisiera que se dieran cuenta que todo esto es una "reacción".
EL SÍNDROME DE LA REACCIÓN
Creo que este puede ser un buen concepto para tratar de explicar el abismo en que estamos, donde no nos conocemos, ni nos valoramos, ni nos amamos… aunque vivamos bajo un mismo techo y usemos la misma mesa para comer. Es allí donde nos ignoramos, nos juzgamos y despreciamos.
Yo siento vuestro desprecio; y con seguridad, Uds. Sentirán mi desprecio, porque los desprecio por ser como son. Si Uds. Piesan que yo soy víctima; yo también pienso igual que ustedes son víctimas de las circunstancias, de los tiempos, del sistema. Que ustedes no son libres. Tampoco responsables, ni éticos, ni religiosos, ni sinceros. Más bien entre ustedes son cínicos, falsos, de doble estadar, explotadores, individualistas, violentos y excluyentes.
¿Cómo pueden pretender, entonces, ustedes que yo y mi generación se alínee a vuestra farsa? No creen que es demasiado pedir; y que es una petición absurda. Creo que solamente los estúpidos podrían acatar tan temeraria solicitud. ¿Acaso no se dan cuenta que Uds., los adultos, han creado una senda de muerte, individualista; que rehuye de la verdad y de los desafíos. Sí, lo que reina entre Uds. Es la cobardía, es la esclavitud, y la fantasía.
Y, de verdad, no crean que esto es "odio". Porque no lo es. Es el síndrome de la reacción. Es decir, la consecuncia de que no nos entendemos, que no nos amamos; que no solidarizamos. Uds. No quieren conocernos porque no quieren aceptarnos; y a nosotras nos pasa igual. Por eso no crecemos. Por eso caminamos hacia un distanciamiento cada vez mayor en el que nos encuentra la muerte como fin de esta larga incomprensión.
YO NO SOY QUIEN
Yo no soy quien para construir puentes sola. Y de nada serviría si acaso fuera capaz de construirlos, porque Uds. No los cruzarían, porque no son de Uds. El egoísmo, por lo general, nos induce a desacreditar lo que hacen los otros, por el hecho de ser hecho por los otros, y no por ti. Pero en este caso, estos puentes para el encuentro solamente puede ser creados con la participación de todas y todos. Aunque es cierto, que por hoy no estamos haciendo nada, porque nos ignoramos y hasta despreciamos sin culpa.
No te he revelado mi edad; ni lo voy a hacer. Pero ya puedes suponer que no tengo muchos años, porque cometo muchos errores. Todavía no tengo la virtud de la prudencia. Es cierto. Pero tengo la virtud de la sensibilidad; poseo sentimientos y emociones que me indican por donde no está la verdad ni la justica. Por eso rehuyo someterme a Uds. Y a su propuesta de vida; porque no es vida, sino servidumbre.
Y es por eso, que mi mayor compañia es la soledad. Yo me siento y camino sola. No reconzco amigos ni maestros. En esta noche oscura suenan con fuerza los gritos de la desesperanza, la desilución y la amargura. Es cierto, te confieso que no soy feliz; que no conozco la paz, ni el amor. Por eso me envuelvo en las burbujas del placer y de las sendas ahumadas para salir de este mundo chato. Sé que estoy en un camino equivocado en medio de otras sendas también equivocadas que son las de mis congéneres adultos. ¿Por qué no reconocemos que ambos estamos equivocados? ¿Que ni unos ni otros poseemos la verdad? ¿Cuándo podríamos ponernos de acuerdo en esto?
Entonces, sí, estaríamos iniciando un camino, el verdadero camino hacia nosotros mismos y hacia la esencia de nuestro mundo; y nos estaríamos apartándonos todos –nosotros y Uds.- del universo de la falsedad.
Sí, tenemos que educarnos todos. Y dejemos ya esa pretención de que Uds. Nos van a educar a nosotras, porque ante todo Uds. No son educados. Una persona educada no miente, no explota, no se apropia de lo ajeno, no acumula, no roba, no incumple las leyes, no finge ser religioso.
Quizá desde nuestra irreligiosidad y desde vuestra religiosidad podamos salir y encontrarnos como lo que somos, para reinventarnos y reconstruirnos y así comenzar a vivir.
II
EL COMIENZO DEL FIN
Así es como yo me imagino que puede ser el principio de nuestro encuentro. Dándonos cuenta que unos y otros estamos extraviados. Perdimos el rubo –Uds. Antes que nosotras-Pero lo que importa ahora es que comencemos a mirarnos a los ojos, y ver que realmente somos seres que tenemos que hacernos de nuevo, y así renovar todo lo que nos rodea como ideas y como realidad.
No hay tiempo que perder. En esto concordamos: en que Uds. Y nosotras ya hemos tocado fondo. Estamos hecho trizas. Todo lo contaminamos, todo lo destruimos; hemos llegado a ser expertos en maltratar a los otros y a lo otro. Nada nos detiene, ni el descalabro ecológico que ya nos envuelve cual siniestro visitante que se acerca a sus autores. Autores que están sordos, ciegos y encarcelados en sus miserables ambiciones de poder.
Estas son las cenizas en las que podemos encontrarnos, cuando reconozcamos lo que somos, y nos despojemos del afán de "fomar", "educar" y domesticar a los otros.
El tiempo no puede ser más propicio; no porque nosotros seamos excepcionalmente inteligentes ni buenos, sino porque la naturaleza, nuestra madre tierra, nos apremia con amor y con urgencia para que despertemos del sueño y salgamos de la droga en que los grandes intereses económicos e ideológicos nos han encarcelado.
Yo no creo que este comienzo del fin sea imposible. ¡Por favor!, concordemos que es necesario y oportuno que comencemos ahora. Uds. Están cansados, desorientados, y sobre todo estancados. Han caído en un hoyo tan profundo, que no tiene irreversabilidad. Y esto los tiene desesperados, nerviosos, ahogándose en la vorágine de un consumismo irracional, como para no ver, ni escuchar, ni sentir. O sea, una especie de estar muertos en vida.
Y yo creo que este es el problema principal; y no nosotras ni nosotros, las nuevas generaciones. Aunque con frecuencia estamos siendo estigmatizadas de ser las causantes del desajuste que hoy vivimos. Lo que sucede es que nosotras consciente o semi-inconscientemente estamos negándonos a recibirles la antorcha apagada que uds. Quieren pasarnos. Sepan que nosotras nos resistiremos sin límites, porque sentimos que estamos en la razon. Si Uds. Han destruído el habitat, a nosotros nos toca no sólo recibir esa herencia sino también transformarla. Tarea que sólo podremos emprender si nos desprendemos de vuestro paradigma.
DONDE YO APRENDO
En las aulas no aprendo. Me siento forzada a estar ahí. Siento que es una educación que no me servirá para cambiar el mundo, porque son enfoques más bien para dejarlo como está y seguir maltratando nuestro mundo con un sistema a-ecológico.
Sí rescato que hay profesores que privilegian escucharnos y parten aceptándonos como somos, con nuestros coleres y peinados, con nuestros temas y lenguajes. A los cuales les pedimos no que nos dejen como estamos, sino que juntos podamos salir ellos y nosotros desde donde estamos.
En este sentido, yo no me siento totalmente reaccionaria, sino más bien, "accionaria". Y esto molesta a muchos, a los que siguen con una actitud autoritaria y dogmática. De verdad, el aula de clase se me vuelve algo así como una prisión. Algo pasa que no me gusta. No sé si es algo externo o interno a mí. Pero me fastidio.
A veces tengo unos momentos distintos, y es cuendo algún profesor tiene tiempo para "escucharme". Por lo general, así puedo expresar mis búsquedas, mis equivocaciones y mis temores. Y me agada sobremanera que me acepten como soy; que no me juzguen ni me condenen. En realidad, yo soy la primera que estoy consciente que no estoy totalmente en el camino de la verdad, sino en gan medida, en el de el de la rebeldía, la curiosidad y la búsqueda.
Aprender me va constando sangre, sudor y lágrimas. A veces, siento que es una tarea que me supera. Otras veces, que no vale la pena aprender para permancer siendo una excluida, un ser al margen de la vida y la abundancia. Y otras veces, también me doy cunta que es la mejor vía para ser alguien, para ser una persona realizada.
Hay muchísimas cosas que necesito aprender..., pero no sé como. Sobre todo no cuento con los espacios propicios para esta actividad. Hay demasiado ruido a mi alrededor.
Sin embargo, tengo intuiciones y certezas de aspectos esenciales que tengo que aprender, como es mi sentido de pertenencia. Responderme esta pregunta: ¿a dónde pertenezco? La claridad que alcence en esto, me ayudará también saber hacia donde me dirijo o debo dirigirme. Mientras no solucione esto, me encuentro en todas partes fuera de lugar. Y este desencuentro de contexto, refleja también mi desencuentro interior: ¿Quién soy?
Desgraciadamente casi no tengo maestros entre mis profesores que me ayuden en esta búsqueda. Por lo general ellos o ellas se centran en sus materias de clase. Es la educación bancaria y libresca. A mí me parece que ellos mismos, en muchos casos, no han resueltos estos temas en sus vidas. De modo que mi aprendizaje, en grado mínimo, es en las aulas. Y lo mismo puedo constatar que es en mi llamado "hogar" o "familia". Y me enfrento a un vacío: ¿quién enseña? y ¿quién aprende?
NO QUIERO CAMINAR SOLA...
Están equivocados quienes creen que quiero caminar sola. Todo lo contrario, me da pánico la soledad. Por eso siempre me verán escuchando música, como una forma de sentirme en comunicación con otros y otras. Sí, es cierto, que tiendo a aislarme y distanciarme de los adultos; y con ello les quiero decir: que no me gusta que me tomen como "menor", como alguien a quien sólo hay que enseñar. Lo que necesito es que me den espacio, me escuchen y que me hagan sentir que soy "alguien", que soy una persona que piensa y que siente.
No crean que disfruto mi ignorancia, mi falta de palabras y de razonamiento... Ellas sonlas carencias más profundas que siento. Es una oscuridad que amenaza con cubrirme como diciéndome que no tengo nada importante que decir y que hacer.
Por eso, mi verdadera búsqueda es la de la amistad. Voy buscando el encuentro con el otro. Y así camino de un lado para otro, recorro kilómetros de lugar en lugar. Uds. me verán muchas veces así, caminando junto con otros de mi edad. Somos buscadores de sentido, de horizontes, de algo y de alguien. Quisiera que mi silencio lo escucharan como "gritos", como llamadas a nuevos encuentros, también con Uds.
Lo que siento es que parecemos rieles que vamos paralelos, pero no nos encontramos. Sin embargo, el horizonte infinito no lo conocemos, y lo soñamos con esperanza. Me pregunto dónde buscar a Dios; dónde encontrarlo..., y finalmente me respondo que no dentro de los templos ni a través de los predicadores; sino en el amor, en el servicio, en la solidaridad, en el ejercicio profético. Y en esto, sieto que camino sola.
Por eso no me gusta y no acepto que me digan "lo que tengo que hacer" personas o funcionarios en los que no creo; y no por capricho, sino por sus acciones. Y ellos tienen que darse cuenta que no son creíbles. Por eso yo no me siento motivada a ir a los templos, lo mismo que inscribirme en los partidos políticos, o creer en los políticos.
Y no estoy de acuerdo con quienes piensan que estas acciones signifiquen un caos o fragmentación del sistema social o religioso. Todo lo contrario, estas son las actitudes necesarias para cambiar un paradigma que está hecho trizas. Por favor, no me inviten a subir a un barco que va rumbo a la muerte, y que va creando muerte a su paso.
¿PESIMISTA?
Es lo más problable que me juzguen así. Pero creánme que no me siento causa, sino víctima. Receptara de la desesperanza de muchos de Uds.; heredera del fracaso existencial y social de una generación que edificó sobre un sistema económico también fracasado. Por lo tanto, mi generación no está recibiendo un mundo como Uds. lo recibieron. Estamos heredando cenizas.
Pese a todo, es una hora para comenzar, edificar; comenzando por poner los cimientos. Y nos gustaría que Uds. lo comprendieran así e incluso nos acompañaran en este gran empresa. Para ello sí queremos prepararnos, y lo estamos haciendo más que todo a través de la biblioteca digital de la red mundial. Allí no encontramos dogmas, sino el universo de la diversidad, sobre la cual tenemos la responsabilidad de elegir lo mejor en todos los campos que constituyen el ser humano. Y claramente allí está el piso a partir del cual vamos a constuir nuestra imago-mundo, nuestro nuevo paradigma; el cual necesariamente va a ser distinto del actual. Esto es motivo de gran alegría porque el continuismo carece de sentido para todos los seres vivos que poblamos la tierra, y a la tierra misma.
Entonces, uds. pueden tratar de entenderme y comprender que mi "pesimismo" más bien es rechazao a la oferta que existe. Una oferta que no proviene de vuestras manos vacías; y son Uds. más bien que estáis ahogados por una desesperanza que os mata. Basta ver como están de caóticas las relaciones intrafamliares, lugares donde habitamos que han dejado de ser "hogares", y donde ha desaparecido la comunicación. Acaso ¿puede existir un ser humano sin comunicación?. De cierto, que no. Es esa la fuente verdadera del "inhumanismo" que uds. resiente, y que todos resentimos.
Sin embargo, yo me siento como "un árbol verde", ya sea en medio del bosque como en medio de los desiertos. Y esta vida no me la dejaré arrebatar por nadie; ni depender de ellos. Es una esencia personal; de la cual dispongo para compartirla.
"LA MIRADA DE MARÍA… EN BUSCA DE UN PUNTO DE INICIO"
I
EL SÍNDROME DE LA REACCIÓN
YO NO SOY QUIEN
II
EL COMIENZO DEL FIN
DONDE YO APRENDO
NO QUIERO CAMINAR SOLA...
¿PESIMISTA?
¿QUÉ HAY DE MI REBELDÍA?
¿QUÉ HAY DE MI REBELDÍA?
Mi rebeldía es lo que más manifiesto, porque la expreso en todo tiempo. Generalmente es contra los adultos, y sus propuestas. Mostrándoles que no me interesan. Que no las necesito. O sea, no caben en mi cabeza que está llena de rechazo por todo. Yo sé que esto no está bien, pero lo hago por un tiempo, porque me interesa hacerlo saber.
Lógicamente yo sé que esto puede desarrollar procesos de búsqueda, preguntas, y no sólo inquietudes, entre Uds. los adultos. Y eso es lo importante. Así, de seguro, que nos vamos a encontrar en un punto del camino, donde se de la encrucijada, el cruce de caminos, y juntos o no, cada uno reciba el aporte que puede hacer el otro desde su experiencia.
Y, creo, que nadie puede ignorar que hay muchas razones para ser rebelde. Es decir, para no estar de acuerdo con todo esto, para no ser pasivos y solamente agachar la cabeza a todo lo que representa el autoritarismo imperante, que domestica y esclaviza a los seres humanos que lo toleran. Por lo tanto, en la medida que se vaya construyendo un nuevo estilo o forma de ser (paradigma), lógicamente se deberán ir desvaneciendo los niveles de rebeldía.
Me parece, también, que todavía no hemos llegado al "pic" del auge de la rebeldía; y que todavía faltan hitos importantes de la que seremos o serán protagonistas los jóvenes. Sabemos que no somos los más fuertes, sino los más débiles, los más carentes..., pero también los portadores de mayores sueños.
¿A qué se debe mis debiilidades? Lógicamente a una situación integral: poco tiempo vivido, pocas experiencias, poca cultura; pero a mi alrededor, entre ustedes, tampoco veo muchas fortalezas, sino más bien, frutaciones, violencia, incomunicación.
Pero el camino no es por la vía de la comparación ni de la rivalidad..., sino claramente por la complementariedad y comunión. Es decir, darnos cuenta que somos seres en construcción, en definición; realizándonos a cada instante. Entonces, necesitamos unos de otros por igual. Nadie es completa ni está hecho o determinado.
Con este enfoque estamos ante un horizonte más dinámico y abiertos a los cambios. Nos alejamos del determinismo y del estatus quo. Nuestra naturaleza es el cambio.
DIÁLOGO CON UN PROFESOR
- Ud., por ejemplo, es uno de mis profesores. ¿Se cuenta cómo lo tratamos? Como si fuera nuestro principal adversario. Practicamente no lo queremos ver; y por eso nos vamos a conversar al fondo de la sala. Otros juegan y saltan y dan gritos... Y a Ud. se le ve sereno; pero también confundido, a veces preocupado.
- Es cierto. Me muestro sereno, pero dentro de mi hay muchas dudas, interrogantes, búsquedas... Y Uds. representen para mí un verdadero desafío. Lo único que se me ocurre es tener paciencia; esperarlos, con la esperanza que Uds. cambiarán. Reflexionarán.
- No creo que eso ocurra, porque tendrían que cambiar muchas cosas antes o simultáneamente. Se tiene que comprender que nuestra forma de ser tan caótica es consecuencia de muchas causas, entre las que hay familiares, social, económicas, psicológicas, emocionales, afectivas...
- Yo concuerdo en ver así el problema. Y por eso los respecto y considero. Uds. no son victimarios, sino víctimas, queridos jóvenes. Por eso les he dicho que voy a permanecer en medio de Uds. pase lo que pase en cuanto a faltas de respeto de vuestra parte. Alguien tiene que acompañarlos. Y yo me considero capacitado para servirles en ofrecerles algún aporte significativo.
- Está bien. Sólo que esa actitud de su parte, solamente la van a entender, comprender y responder unos pocos de mis compañeros y compañeras de curso.
Incluso, tal vez yo.
- Y de qué depende...
- Creo que es una cuestión emocional, más que todo. Algún detalle, como puede ser su saludo afable, su mirada amable y respetuosa. Creo que es cuestión de que se genere confianza y respecto entre Ud. y nosotros los estudiantes... Igual, me parece, que algunos de mis compañeras y cmpañeros, nunca se acercarán porque son muy profundas sus heridas y sus resentimientos con todo esto que se denomina sociedad. No quieren saber nada de ella. Ellos sienten que dicha sociedad les ha hecho mucho daño a sus padres y a ellos mismos: pasando hambre, pagando usureros intereses, comprando carísimo y enriqueciendo a unos pocos monopolios de supermercados, farmacias, medios de transporte, etc.
- Siempre he dicho que frente a tales planteamientos me quedo sin palabras. Recuerdo cuando un alumno de una cárcel, me espetó: "Profesor, si todos roban, los políticos, las autoridades... yo mismo, siempre he pagado altas cantidades de dinero y así he salido o ni siquiera he entrado a la cárcel; entonces, ¿por qué no voy a robar yo?
- Bueno, ¡yo también me quedo estupefacta!, querido profesor.
APELANDO A LA RESILIENCIA
- Estamos buscando un "punto de encuentro" que sea el principio de un largo camino de encuentro y realizaciones, ¿no es cierto? Y me despierta bastante interés el tema que hace poco nos ha planteado, cuando nos dice: "Si Uds. no se acercan a mí, yo debo de acercarme a Uds". Porque, dice, que lo alienta la esperanza que en nosotras y nosotros hay una fuerza, una energía, una capacidad que nos levanta y saca del hoyo más profundo en que nos podamos encontrar por haber caído en la drogadicción, o en la prostitución, el alcoholismo, la violencia, los robos,... y esto con apenas nuestro promedio de los 16 años de edad. Pero Ud. puede ver nuestros rostros demacrados, pálidos; nuestras mirads perdidas y nuestros cuerpos inquietos por la necesidad de consumir droga. Por escucha nuestros gritos, de vez en cuando en la sala de clase: ¡"Quiero matarme"!
Estos son las expresiones de nuestro drama. Por eso no podemos estudiar, aunque quisiéramos. De verdad, hemos perdido la capacidad de concentración, y el interés por todo. No nos interesa nada, ni siquiera nosotros mismos. Sentimos que no valemos nada. Que hemos nacido para ser nada. Nos sentimos como tendidos, postrados, deshechos... Por eso, Ud. es testigo de nuestras contínuas lágrimas cuando conversamos con Ud. Esos diálogos son muy removevodores para nosotras y nosotros, porque no estamos acostumbrados a que nos escuchen, que nos presten atención, y que a través de su mirada sintamos que quieren creer en nosotros y quieren confiar... Eso es algo maravilloso. Es como empezar a revivir.
- Gracias, María, por expresarte con tanta claridad y acierto. Yo sabía que uds. no son los victimarios, uds. son las víctimas. Es decir, el producto de muchos desaciertos de todos cuantos les hemos antecedido, en todos los campos. Se hizo un giro hacia la letra; y la letra mata. Nos alejamos de la vida, de lo humano, y dejamos de sentir misericordia y compasión. Nos encerramos en nosotros mismos y en nuestras propiedades, olvidándonos de todo compromiso social. Y esto ha sido nuestra ruina. Hemos fracasado.
- Entonces esta es la hora para la resiliencia. Para levantarnos desde las cenizas, todos juntos, ¿no es cierto?, estimado profesor...
Así, María, ¿pero tú no te imaginas cuánto cuesta "ser resiliente"? Cuán difícil es cambiar la mentalidad para dejar de fijarse en los defectos y debilidades de sí mismo y de los demás; y centrarse en sus fortalezas y cualidades. Es un cambio tan gande que modificaría de raíz nuestras relaciones actuales, basadas en la competencia y el desprestigio de los otros. Es una forma de relación muy dañina, que frena todo emprendimiento y menoscaba la confianza. Nuestras relaciones son de desconfianza.
- Efectivamente, de muchas maneras se pretende inculcarnos miedo, como si este no fuera nuestro mundo y nuestro hogar. Nos pretenden hacernos sentir en un lugar extraño y adverso para nosotros.
- Lo que pasa es que quienes están llenos de pánimo, solamente pueden transmitir miedo. La confianza es una de las más grande pérdidas de nuestro tiempo. Se ha convertido en una enfermedad con el nombre genérico de estress.
domingo, 19 de abril de 2009
El tiempo sigue su marcha... y al mirar atrás van quedando nuestras obras, pequeñas o grandes realizaciones. Aquellas oportunidades que creamos o descubrimos, e intervenimos para que tomaran realismo. Esta fue mi experiencia con la señal de televisión en Malloco. Me siento contento de haber sido el iniciador e impulsador hasta dejarlo en manos de personas que quieren seguir ese sendero.
Mientras tanto, mi inquietud me lleva ahora a invitar a una ESCUELA DE ESPIRITUALIDAD. Y sueño con muchos grupos, como especie de células, de 10 personas que se reunan para dedicarse tiempo a sí mismo, y descubran que a su quehacer cotidiano y laboral le pueden imprimir el sentido trascendente que les impregne de sentido humano y profundo, que redunde en mayores cuotas de alegría, paz y nuevas utopías. Porque, me parece, que nos falta mucha esperanza, mucha creatividad y mucha valentía. Creo que no debemos continuar inmersos e una interminable repetición cíclica que no incentiva el cambio ni el desarrollo personal.
(También agradezco que se hayan fijando en mi historia para que sea una de las que formarán parte en la venidera serie "América en Chile", por la señal internacional de tvn (televisión nacional de Chile).
18 de abril, 2009.
Mientras tanto, mi inquietud me lleva ahora a invitar a una ESCUELA DE ESPIRITUALIDAD. Y sueño con muchos grupos, como especie de células, de 10 personas que se reunan para dedicarse tiempo a sí mismo, y descubran que a su quehacer cotidiano y laboral le pueden imprimir el sentido trascendente que les impregne de sentido humano y profundo, que redunde en mayores cuotas de alegría, paz y nuevas utopías. Porque, me parece, que nos falta mucha esperanza, mucha creatividad y mucha valentía. Creo que no debemos continuar inmersos e una interminable repetición cíclica que no incentiva el cambio ni el desarrollo personal.
(También agradezco que se hayan fijando en mi historia para que sea una de las que formarán parte en la venidera serie "América en Chile", por la señal internacional de tvn (televisión nacional de Chile).
18 de abril, 2009.
jueves, 12 de febrero de 2009
Un medio de comunicación misionero...
Creo que es legítimo hablar de "misionero" hoy en día; solamente que con tolerancia. Solamente ejercer el derecho de presentar su verdad a la sociedad, y que cada quien, y con una conciencia formada y madura, vaya haciendo sus elecciones del orden también espiritual y religioso.
En este sentido, la señal de tv podría prestar un servicio en esta dirección; pero para ello requiere de una base de personal que cree dichos espacios. Esta actividad no es fácil ni espontánea.
Algo de lo más necesario es la creatividad y la capacidad de andar caminos nuevos; hacer caminos nuevos..., no se trata de continuar con los mismos paradigmas, con las mismas formas. Por otra parte, dicha orientación sería de las más cómodas. Hoy es tiempo de trabajar mucho y de crear y acompañar a los niños y jóvenes.
El 2009 se nos presenta como una gran oportunidad, desafío y tiempo de mucho trabajo con este espíritu misionero y de espiritualidad.
Estamos dispuestos y trabajando ya en esta dirección. Así mismo les deseo el mayor éxito a cuantos están sientiendo y haciendo lo suyo en este campo.
jl
En este sentido, la señal de tv podría prestar un servicio en esta dirección; pero para ello requiere de una base de personal que cree dichos espacios. Esta actividad no es fácil ni espontánea.
Algo de lo más necesario es la creatividad y la capacidad de andar caminos nuevos; hacer caminos nuevos..., no se trata de continuar con los mismos paradigmas, con las mismas formas. Por otra parte, dicha orientación sería de las más cómodas. Hoy es tiempo de trabajar mucho y de crear y acompañar a los niños y jóvenes.
El 2009 se nos presenta como una gran oportunidad, desafío y tiempo de mucho trabajo con este espíritu misionero y de espiritualidad.
Estamos dispuestos y trabajando ya en esta dirección. Así mismo les deseo el mayor éxito a cuantos están sientiendo y haciendo lo suyo en este campo.
jl
domingo, 21 de diciembre de 2008
NAVIDAD 2008
Feliz tiempo de Navidad..., precidido por el tiempo de adviento... alegre espera que nos aguarde de buenas nuevas con toda certeza. Siendo esto lo principal.
He comprendido que los obstáculos son parte del vivir, y causa de nuestro desarrollo espiritual y profesional. Por eso, lejos de entristecerme, me alegro y me lleno de esperanza de tiempos nuevos, acompañados de nuevos aprendizajes y de maduración espiritual. No soy quien para juzgar a los demás, ni sus acciones, menos sus intenciones. El juicio queda a Dios. A mí lo que me corresponde es asimilar los golpes, en este caso, el silenciamiento causado por mis hermanos. Es probable que yo esté equivocado; o que ellos no hayan comprendido mi pensamiento ni mis intenciones. Pero a todas luces pensamos diferente: yo había soñado con una señal de tv cultural-comunitaria-y-misionera. Esto conlleva un trabajo constante, creciente e integrador. Pero he aprendido que dichas actividades se pueden desarrollar en múltiples áreas, y no necesariamente en una sola; en este caso, en la tv. En todo caso el fruto de mi trabajo y dedicación está ahí; así como también la confianza y apoyo que en su momento me brindaron las personas de mi comunidad.
Desde este lado de la muralla, FELIZ NAVIDAD A TODOS Y UN BUEN AÑO 2009, lleno de ralizaciones, crecimiento espiritual, de paz y amor.
josé leandro flores
22 de diciembre de 2008.
He comprendido que los obstáculos son parte del vivir, y causa de nuestro desarrollo espiritual y profesional. Por eso, lejos de entristecerme, me alegro y me lleno de esperanza de tiempos nuevos, acompañados de nuevos aprendizajes y de maduración espiritual. No soy quien para juzgar a los demás, ni sus acciones, menos sus intenciones. El juicio queda a Dios. A mí lo que me corresponde es asimilar los golpes, en este caso, el silenciamiento causado por mis hermanos. Es probable que yo esté equivocado; o que ellos no hayan comprendido mi pensamiento ni mis intenciones. Pero a todas luces pensamos diferente: yo había soñado con una señal de tv cultural-comunitaria-y-misionera. Esto conlleva un trabajo constante, creciente e integrador. Pero he aprendido que dichas actividades se pueden desarrollar en múltiples áreas, y no necesariamente en una sola; en este caso, en la tv. En todo caso el fruto de mi trabajo y dedicación está ahí; así como también la confianza y apoyo que en su momento me brindaron las personas de mi comunidad.
Desde este lado de la muralla, FELIZ NAVIDAD A TODOS Y UN BUEN AÑO 2009, lleno de ralizaciones, crecimiento espiritual, de paz y amor.
josé leandro flores
22 de diciembre de 2008.
domingo, 23 de noviembre de 2008
NUEVOS VIENTOS...
A once meses de camino (diciembre 2007- noviembre 2008), las circunstacias me ogligan a apartarme de este sueño-esperanza. No he sido capaz de comunicar y contagiar a los demás de mis más profundas convicciones: trabajar por un hombre/mujer y mundo nuevos, a la luz de Evangelio y de las orientaciones más vanguardistas de la comunidad (iglesia). Me equivoqué con quienes pensé que eran mis hermanos y que estábamos trabajando en la misma dirección. Se han quebrado las confianzas y la fraternidad.
Está bien. Ellos han encontrado que yo estoy equivocado y que conmigo no se puede trabajar. Son sus razones, puntos de vista y opiniones que esta vez han triunfado. Cada quien tiene su conciencia y sabrá que los mueve realmente.
El camino sigue, la inmensidad del horizonte nos sigue convocando a ser creativos, humildes, pacientes, buscadores de la verdad, la justicia y el amor. Y yo solamente quiero ser fiel a esta vocación. Las demás circunstancias son pasajeras para todos.
Hoy día, el silencio y la meditación son mis mejores aliados para reconciliarme conmigo mismo y con el Otro y los otros. En realidad mi lucha no es contra los intereses de otros hombres/mujeres, sino que mi energía está puesta en hacer espacios al amor, a la solidaridad, a la comunicación de todos. Valoro mucho que los demás piensen, lean, hablen, se asocien, hagan cosas nuevas, inicien procesos innovadores en sus vidas y en sus comunidades.
Este ha sido el horizonte desde mi infancia a partir de 1951. Y allí están las muestras: un enfoque misionero distinto en las vacaciones de estudiante, la creación de la escuela de formación en teología y disciplinas afines para los hermanos legos franciscanos de centroamérica (1974-1978), el ejercio pastoral como presbítero franciscano (1980-1990)... tienen la misma inspiración de esta última intervención, esta vez en los medios de comunicación.
Bienaventurados los que trabajan por el reinado de Dios..., que es trabajar por la vida, la libertad y la dignidad de todos los seres vivos que habitamos en esta tierra.
josé leandro flores
23 de noviembre de 2008.
Está bien. Ellos han encontrado que yo estoy equivocado y que conmigo no se puede trabajar. Son sus razones, puntos de vista y opiniones que esta vez han triunfado. Cada quien tiene su conciencia y sabrá que los mueve realmente.
El camino sigue, la inmensidad del horizonte nos sigue convocando a ser creativos, humildes, pacientes, buscadores de la verdad, la justicia y el amor. Y yo solamente quiero ser fiel a esta vocación. Las demás circunstancias son pasajeras para todos.
Hoy día, el silencio y la meditación son mis mejores aliados para reconciliarme conmigo mismo y con el Otro y los otros. En realidad mi lucha no es contra los intereses de otros hombres/mujeres, sino que mi energía está puesta en hacer espacios al amor, a la solidaridad, a la comunicación de todos. Valoro mucho que los demás piensen, lean, hablen, se asocien, hagan cosas nuevas, inicien procesos innovadores en sus vidas y en sus comunidades.
Este ha sido el horizonte desde mi infancia a partir de 1951. Y allí están las muestras: un enfoque misionero distinto en las vacaciones de estudiante, la creación de la escuela de formación en teología y disciplinas afines para los hermanos legos franciscanos de centroamérica (1974-1978), el ejercio pastoral como presbítero franciscano (1980-1990)... tienen la misma inspiración de esta última intervención, esta vez en los medios de comunicación.
Bienaventurados los que trabajan por el reinado de Dios..., que es trabajar por la vida, la libertad y la dignidad de todos los seres vivos que habitamos en esta tierra.
josé leandro flores
23 de noviembre de 2008.
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